Historia del Comercio Internacional (Parte II): De la caída del Imperio Español y el crecimiento del Imperio Británico

El ocaso del Imperio Español llegaría luego de haber disfrutado del llamado "Siglo de oro" (1521 - 1643) en medio del cual se cuentan los primeros conflictos en contra del imperio. Los enfrentamientos en contra de Francia, Países Bajos e Inglaterra suscitados principalmente en el tercer cuarto del siglo XVI e inicios del siglo XVII, sumados a los continuos saqueos de la piratería en el Atlántico llevaron al imperio español a declararse en bancarrota en 1596. Luego de ello, su esfuerzo por el equilibrio llevó al imperio a firmar la paz con Francia y luego con Inglaterra para enfocarse en retomar su presencia en Países Bajos. Luego de un sin número de conflictos internos,a mediados del S. XVII, España se veía limitada económica y militarmente. Los catalanes, napolitanos y portugueses, apoyados por Francia, se alzaron en numerosas rebeliones contra España en la década de 1640. El imperio Español vivió un época de estancamiento y decadencia en las últimas décadas del siglo XVII; mientras que el resto de Europa continuaba en un proceso de crecimiento. Para 1718 Cádiz se convertía en el único puerto de comercio con las Américas. El contrabando de mercancías fue uno de los más graves problemas del imperio. Sin embargo al ponerse en operatividad los navíos de registro en la década de 1760, ya habían rutas regulares entre Cádiz, La Habana y Puerto Rico, y en intervalos más largos con el Río de la Plata y el contrabando disminuyó considerablemente. 

Vista del puerto de Cádiz. Fuente: Todo a Babor

Por su parte, dos hechos conmocionaron la América española y al mismo tiempo demostraron la eficiencia del nuevo sistema reformado del imperio: la rebelión de Juan Francisco de León en 1748 contra la Compañia Guipuzcoana de Venezuela (que luego se convertiría en la Compañía de las Filipinas) y el alzamiento de Túpac Amaru II en Perú en 1780. 

Alegoría de la muerte de Túpac Amaru a manos de españoles (1781). Fuente: Blog Imágenes y Textos Selectos

Con el tiempo y a pesar de las mejoras en la construcción de navíos más rápidos y el comercio creciente con las Américas, finalmente se inicia el ocaso del imperio español. España pierde el territorio de Luisiana (en EE.UU. pero que se extendía hasta Canadá). Los franceses, bajo el mando de Napoleón, la obtuvieron como parte del tratado de paz de 1800 para después vendérselo a Estados Unidos en 1803. La flota española destruida –por los franceses en la Batalla de Trafalgar (provincia de Cádiz, 1805) disminuyó la defensa ya debilitada del imperio. Napoleón invade la península ibérica en 1808 y cortó la comunicación con las colonias fuera de Europa. En 1808 el rey español Carlos IV fue engañado y España fue tomada por Napoleón sin disparar un arma, pero esta invasión produce el levantamiento de la nación, y se da inicio así a la guerra de guerrillas al interior del imperio, minando su estructura económica y social. Por otra parte, la guerra por la independencia de Estados Unidos (1779 - 1883) y los esfuerzos independentistas en América (1811 - 1865) significaron el fin del monopolio de Cádiz en el comercio con América. Finalmente, algunos de los territorios Africanos también se fueron perdiendo por tratados y cedidos a Portugal. Otros disputados o convertidos en protectorados franco-españoles. Finalmente, se erige como nuevo poderío global el Imperio Británico.

Independencia del Perú (1821)

El imperio Británico fue  más extenso territorialmente; se inicó su formación en el siglo XVIII, pero alcanzó la madurez durante el largo reinado de Victoria (1837-1901), secundada por la acción de sus ministros Disraeli y Chamberlain. Hasta antes de ello.el reino de Inglaterra sólo controlaba territorios costeros o islas con claras aspiraciones comerciales. Algunos de ellos habían pertenecido a Francia, Holanda o España: El Cabo en el Sur de África, la isla de Ceilán en el Índico, Malta y Corfú en el Mediterráneo, Gibraltar y Santa Elena en el Atlántico, entre otros. La derrota de Napoleón reforzó su posición dominante sobre las naciones del viejo mundo. Sus dominios se extendían en los cinco continentes conocidos (más información de sus territorios aquí).

De resaltar en la historia del auge del imperio británico es que éste facilitó la extensión de la tecnología, el comercio, el idioma y el gobierno británicos por todo el mundo, con presencia incluso en América. Francis Drake (Tavistock, Inglaterra, 1543 – Portobelo, Panamá, 28 de enero de 1596) es considerado Corsario en el Reino Unido y Pirata en España: explorador, comerciante de esclavos, político y vicealmirante de la )Marina Real Británica. Llegó a asolar las costas de los virreinatos españoles (ruta de Magallanes y por Panamá). La corona inglesa influyó en las rebeliones que confluyeron en la independencia de los estados Unidos y se conoce de su participación en los procesos independentistas de América.

El período entre 1870 y el comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, se caracterizó por una búsqueda de "el poder por el poder". Se buscaba la tenencia de territorios de ultramar y aparecen en los países conquistadores las "doctrinas" que justifican la superioridad racial y que niegan la aptitud de los pueblos subyugados para gobernarse por sí mismos. A este período se le denomina a menudo el «Nuevo Imperialismo». 

Imperio Británico y sus colonias (1921) Fuente: Wikipedia

Luego de  la Primera Guerra Mundial el Imperio británico conoció extendió sus territorios: obtuvo el control de Palestina y Mesopotamia a través del mecanismo del mandato de la Sociedad de Naciones, tras la caída del Imperio otomano en el Oriente Próximo. Además se hizo de las antiguas colonias alemanas: Camerún, Togolandia, África Oriental Alemana (Tanganica, Ruanda y Burundi), África del Sudoeste (actual Namibia) y Nueva Guinea Alemana (las dos últimas quedaron bajo control de la Unión Sudafricana y Australia, respectivamente). Las zonas ocupadas por el Reino Unido del Imperio Alemán (Camerún Británico, Togolandia británica y Tanganica) tras la guerra no fueron consideradas parte del Imperio.

Sin embargo. luego se iniciaron los procesos independentistas de sus dominios, la que se formalizó en 1926 mediante la Declaración Balfour y el Estatuto de Westminster de 1931. Luego se sumaran los procesos de descolonización producto del crecimiento de movimientos nacionalistas en territorios súbditos durante la primera mitad del siglo XX.